Nota para Estudiantes
Queridos Estudiantes:
Desde hace algún tiempo, mi política personal y profesional ha sido ser útil a los demás como pueda. Irónicamente, entre más avanzo en el conocimiento científico y en la obtención de financiamiento, y de esa manera más fácilmente puedo ayudar a mis alumnos; tengo menos disponibilidad de tiempo para hacerlo. Siempre recibo solicitudes de estudiantes que piden mi ayuda, e intento hacerme un tiempo para responderles (aunque muchas veces me demore). Así pues, a veces debo escoger ayudar a un número menor de personas, pero a los cuales les respondo con mis mejores esfuerzos. Inevitablemente hago frente a la desagradable tarea de elegir qué estudiantes ayudar y a cuáles no me es posible.
Es importante para mí ver el esfuerzo de los estudiantes: (1) cuánto trabajo han invertido en sí mismos, en su formación autodidacta, antes de pedir mi ayuda, y (2) en cuan limitados son los recursos disponibles para ellos. No cuido cuántas horas pasaron buscando en Internet. Claro, esta es una buena herramienta, es conveniente, pero (con deplorablemente pocas excepciones), es apenas una buena fuente de información científica exacta. Es fundamental que visiten bibliotecas especializadas, revisen libros clásicos o revistas científicas y conozcan los dos tomos del Compagno (1984).
Entre más avanzados están en el colegio o universidad, más trabajo espero que hagan por sus propios medios antes de contactarme. Si pueden demostrarme, que han hecho un esfuerzo razonable y no han logrado lo que buscan (porque, por ejemplo, viven en una ciudad pequeña que tiene poco o nada de material de referencia en el tema elegido), estaré feliz de enviarles la información necesaria para ayudarles a terminar su proyecto. Cuanto más trabajo puedan demostrarme que han hecho, más me motivaré a dejar de lado temporalmente mis tareas para ayudarlos.
En el fondo, respeto la labor escolar. Si pueden demostrarme que han invertido un esfuerzo substancial en su propio aprendizaje, los invito a que me contacten y prometo, aquí y ahora que haré todo mi esfuerzo y energía en ayudarlos (dentro los límites de mi disponibilidad).
Así que, ¿quieren mi ayuda? ¡Impresiónenme!
Prof. Julio Lamilla Gómez (†)